Desde su casa habitación retomó sus atenciones la propietaria de la Hostería Lipingüe, cuyo restaurante resultó completamente destruido tras un incendio ocurrido hace pocos días.
La acción del fuego destruyó por completo el recinto, generando pérdidas por 150 millones de pesos, no obstante a pocos días del hecho, su dueña decidió continuar con la atención del públicos y sus clientes, esta vez desde su casa habitación.
“Decidimos con mi familia continuar trabajado para no dejar lado a nuestros clientes y si bien es un espacio más pequeño, hemos vuelto atender con la cordialidad que nos caracteriza”, señaló Clorinda Rivera a Pagina14.
La propietaria señaló que si bien la pérdida del inmueble con todo los enseres y máquinas que se utilizan en un restaurante ha sido un proceso difícil, asegura tener la confianza para continuar.
“Esto ha sido un proceso muy difícil, pero tengo mucha fe en Dios y eso me da la fuerza para seguir adelante”, recalcó.
De este modo, la Hostería Lipingüe continúa con su atención, principalmente con la entrega de colaciones para llevar o en su defecto para servir en un ambiente más reducido, pero hogareño.